Gvozdenovich cuestionó la falta de debate en la última sesión del año y explicó los alcances del nuevo Código de Convivencia
En la segunda parte de la entrevista realizada en Buen Día Ciudad, el legislador provincial Matías Gvozdenovich se refirió a la sesión de la Legislatura de Córdoba del lunes 29 de diciembre, la última del año legislativo, donde se debatieron y votaron modificaciones al Código de Convivencia Provincial, en un temario que incluyó cuestiones altamente sensibles como los limpiavidrios, los cuidacoches (“naranjitas”), la circulación de motos y la vacunación obligatoria.
Gvozdenovich señaló que desde su bloque reclamaron un debate más profundo sobre varios de estos puntos. “Pedíamos discutir con mayor profundidad temas como naranjitas, limpiavidrios, motos y vacunas. Son cuestiones que impactan directamente en la vida cotidiana de la gente y no pueden resolverse sin un análisis serio”, expresó.
En relación con la vacunación, advirtió que algunas sanciones propuestas rozaban la inconstitucionalidad. “Hablar de meter presos a padres o aplicar multas sin un encuadre claro puede deformar el espíritu de la ley nacional. La Constitución no dice que los padres tengan que ir presos por no vacunar a sus hijos”, afirmó, al tiempo que remarcó la necesidad de respetar el marco constitucional y las leyes de fondo.
Respecto a los limpiavidrios y cuidacoches, el legislador reconoció la complejidad del tema. Sostuvo que existen situaciones delictivas encubiertas bajo estas prácticas, pero también personas que viven de esa actividad y quedaron fuera del sistema. En ese sentido, marcó una diferencia entre las grandes ciudades y el interior: “No es lo mismo convivir todos los días con estas situaciones en Córdoba capital que vivir en una ciudad chica o en un pueblo, donde la sensación de libertad es distinta”.
Uno de los ejes centrales de la reforma, explicó, es dotar a la Policía de herramientas legales más claras para intervenir. Detalló que se endurecieron sanciones por consumo de alcohol o drogas en la vía pública, peleas callejeras, fiestas clandestinas y ataques a docentes, médicos, funcionarios y personal de seguridad. “Antes muchas veces la policía no actuaba porque no tenía el marco legal. Ahora lo tiene, y debe hacerlo”, sostuvo.
Gvozdenovich destacó especialmente el endurecimiento de las penas por merodeo rural, un punto que su bloque acompañó con firmeza. “Vemos los desastres que se producen en los campos y era necesario actuar con mayor dureza”, señaló. También valoró la incorporación de sanciones ambientales, como multas o trabajos comunitarios para quienes arrojen basura en lugares no habilitados. “Cuidar el ambiente es fundamental; no puede ser que alguien tire residuos en las afueras de la ciudad como si nada”, remarcó.
El legislador aclaró que el texto aprobado incluyó numerosas modificaciones para evitar excesos y posibles inconstitucionalidades. “El Código de Convivencia no puede modificar leyes de fondo como el Código Penal o el Procesal. Su función es ordenar la convivencia, no reemplazar normas superiores”, explicó.
Finalmente, Gvozdenovich subrayó que, con la ley ya sancionada, ahora la responsabilidad es del Estado provincial. “Las herramientas que la policía necesitaba ya se las dimos. Ahora tiene que actuar. Y si faltan móviles, logística o recursos, ahí vamos a estar para reclamar, como lo venimos haciendo en Marcos Juárez y en todo el interior”, concluyó.


